Informe semestral sobre el precio de la recarga en Francia
Avere-France ha revelado recientemente su informe semestral sobre las tarifas de recarga de vehículos eléctricos en Francia. En general, los costos han aumentado, excepto en los puntos de recarga de 50 a 150 kW, que han experimentado una ligera disminución. A pesar de esta tendencia al alza, conducir un coche eléctrico sigue siendo mucho más económico que conducir un coche de combustión.
Aumento de los costos de recarga
A pesar del notable aumento de los costos de la electricidad a lo largo de los años, recargar un coche eléctrico sigue siendo ventajoso, ya sea en casa o en puntos de recarga públicos. El informe de Avere-France indica que el costo de la recarga pública ha aumentado globalmente de enero a junio. La recarga en tomas de corriente alterna de menos de 22 kW ha visto un aumento del 27,8 %, pasando de 0,288 euro/kWh en enero a 0,368 euro en junio. Este aumento se debe principalmente a una ampliación de la base de datos de Avere-France.
Las estaciones de carga ultra-rápidas de más de 150 kW también han visto aumentar sus tarifas, pero de manera más moderada, con un incremento del 6,77 %, alcanzando 0,473 euro/kWh en junio frente a 0,443 euro en enero. Sin embargo, las tarifas varían de un operador a otro, algunos siendo más costosos que otros, como Ionity en comparación con Lidl.
Reducción en los puntos de recarga rápidos de 22 a 150 kW
A pesar de estos aumentos, se observa una reducción en los puntos de recarga rápidos de 22 a 150 kW. Su tarifa ha disminuido un 6,08 %, pasando de 0,477 euro/kWh en enero a 0,448 euro en junio. En resumen, excluyendo los aumentos en los puntos de recarga en corriente continua, el precio de la recarga se mantiene relativamente estable en Francia.
Ventajas de la suscripción
El informe muestra que suscribirse a un plan puede ser particularmente ventajoso. Sin suscripción, un conductor promedio gastaba 26,54 euros en junio para la recarga pública (26,40 euros de media en los primeros seis meses de 2024), mientras que un gran conductor gastaba 80,20 euros (84,33 euros de media). Con una suscripción, estos costos pasan respectivamente a 16,38 euros y 77,96 euros, lo que representa una reducción del 37,95 % y 7,55 %.
Las ofertas de suscripción son cada vez más favorables y simplificadas, haciendo que esta opción sea atractiva incluso para aquellos que no conducen mucho.
Comparación con los vehículos de combustión
Cualquiera que sea la situación, recargar un coche eléctrico sigue siendo mucho más barato que llenar el tanque de combustible. Para un conductor típico (con un 80 % de recarga en casa) y en comparación con un coche de gasolina o diésel, los ahorros son significativos. En junio de 2024, un conductor de coche eléctrico gastaba en promedio 34,89 euros en electricidad por mes, frente a 104,24 euros para un diésel y 110,94 euros para un gasolina, es decir, una reducción del 66,53 % y 68,55 % respectivamente.
Los grandes conductores también se benefician de ahorros similares de alrededor del 65 %. Estos ahorros podrían ampliarse con posibles futuras reducciones en los costos de la electricidad.